REVISTA 2008

Una vez más la Centuria Romana dedica estas líneas para la Revista de la Semana Santa, siempre hemos estado ahí, ¿Donde? Donde había que estar, los Romanos y sin animo de equivocarnos posiblemente son los que más horas dedican a la Semana Santa de Albendin, el pueblo nos ve el Viernes Santo y unas veces mejor y otras peor, pero deben de comprender que supone un gran esfuerzo material y humano sacar esta modesta pero orgullosa banda a la calle, ya desde que pasa el Día de Jesús comienza el movimiento, buscar nuevos niños dispuestos a aprender y a salir, conseguir ropas, comenzarlos ensayos, colaborar con la Hermandad siempre y cuando es necesario, y este año dando muestra de nuestro compromiso con el futuro de la Semana Santa ayudando a los más pequeños de la Hermandad de la Borriquita a sacar su procesión, porque somos una gran parte de los Romanos los que el Domingo de Ramos estaremos debajo de ese paso, además de cumplir con nuestro compromiso con las Hermandades que nos solicitan colaboración, como es el caso de la Hermandad del Huerto, con la cual para engrandecer en la medida de nuestras posibilidades su procesión los acompañaremosc omo ya hicimos el año pasado en su estación de penitencia.

Es difícil contar con gente comprometida en ensayar día tras día, congente dispuesta a dar parte de su vida diaria a la Centuria, pero graciasa Dios los que estamos nos esforzamos y nos esforzaremos por los Romanos sigan estando donde tienen que estar acompañando a su imagen y ayudando a todos aquellos que lo necesiten, al igual que muchas personas nos ayudan a nosotros y para todos ellos como hacemos año tras año nuestro más sincero agradecimiento.

Por supuesto no podemos dejar pasar este año una triste noticia, este año nos falta un Romano, nos falta un tambor y sobre todo nos falta un amigo, pero nos queda el recuerdo, esa Semana Santa en que el tambor del “Gordo” hizo las delicias de todos entre capas y lanzas, lo recordamos cada vez que nos juntamos, llego tarde a la procesión del Viernes Santo, pero llego, este año tristemente no llegara pero nuestros tambores y nuestras cornetas miraran al cielo porque aunque no llegue estará con nosotros.